Subiendo Jesús en una barca, pasó al otro lado del mar y llegó a Su ciudad. Y Le trajeron un paralítico echado en una camilla; y Jesús, viendo la fe de ellos, dijo al paralítico: "Anímate, hijo, tus pecados te son perdonados." Y algunos de los escribas decían para sí: "Este blasfema." Jesús, conociendo sus pensamientos, dijo: "¿Por qué piensan mal en sus corazones? "Porque, ¿qué es más fácil, decir: 'Tus pecados te son perdonados,' o decir: 'Levántate, y anda'? "Pues para que sepan que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados," entonces dijo al paralítico: "Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa." Y levantándose, el paralítico se fue a su casa. Pero cuando las multitudes vieron esto, sintieron temor, y glorificaron a Dios, que había dado tal poder (autoridad) a los hombres. Cuando Jesús se fue de allí, vio a un hombre llamado Mateo, sentado en la oficina de los tributos, y le dijo: "¡Ven tras Mí!" Y levantándose, Lo siguió. Y estando El sentado a la mesa en la casa, muchos recaudadores de impuestos y pecadores llegaron y se sentaron a la mesa con Jesús y Sus discípulos. Cuando los Fariseos vieron esto, dijeron a Sus discípulos: "¿Por qué come su Maestro con los recaudadores de impuestos y pecadores?" Al oír Jesús esto, dijo: "Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los que están enfermos. "Pero vayan, y aprendan lo que significa: 'MISERICORDIA QUIERO Y NO SACRIFICIO'; porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores." Mat 9:1-13 NBLH.
Vean esta cita del libro escrito por un evangélico Cristiano en los EE.UU. Destaca las calificaciones que se necesita para tener la vida eterna:
"Mateo 9:9-13 describe el incidente juntamente con la controversia a que dio lugar. En una de las declaraciones más importantes contenidas en la Biblia, dice el Señor: "no he venido para llamar a justos, sino a pecadores" (v. 13). Esta declaración contiene una perspectiva cabal del ministerio de Jesús, un resumen del mensaje cristiano, una visión del núcleo del evangelio y la razón básica que respalda la encarnación.
¿ A que vino Jesús al mundo? A llamar a los pecadores, a los que saben que tienen una enfermedad mortal, a los que están sin esperanza, a los abrumados por la pena, los hambrientos y sedientos, los débiles, los cansados, los quebrantados, aquellos cuyas vidas están deshechas, a los pecadores desesperados que saben que son indignos pero desean ser perdonados.
Las palabras iban dirigidas a los autosuficientes fariseos que, como muchos hoy, pensaban que eran justos y no tenían ninguna necesidad espiritual. Lo cierto es que a menos que las personas se den cuenta de que tienen un problemas de pecado, no acudirán a Cristo en busca de solución. No acuden en busca de curación a menos que sepan que tienen una enfermedad; no vienen en busca de vida a menos que sean conscientes de que están condenados a muerte; no vienen en busca de salvación a menos que se sientan abrumados por la esclavitud del pecado.
Jesús vino a mostrarnos que somos pecadores. Por eso su mensaje era penetrante, poderoso. El hizo pedazos nuestra propia justicia y descubrió nuestros corazones malignos para que pudiéramos vernos como pecadores."
~ Juan MacArthur. El Evangelio Según Jesucristo. Casa Bautista de Publicaciones. El Paso TX. Copyright 1991. pg 61. www.gracia.org
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