sábado, 20 de noviembre de 2010

Sabado - Blogeando sobre psicologia

Permite que use mi spanglish cuando digo, "blogeando". Es una palabra inventada pero no tengo mas imaginacion para crear un titulo interesante. Hoy está bonito pero en todo el mundo veo que hay una oscuridad en los corazones. Me alegro ver lo que Dios hace dejando brillar unas luces en la oscuridad. Demuestra que Dios tiene el control y soberania en las vidas de unas personas que viven hoydia.

La psicología es un fenómeno que afecta a nuestros pensamientos y nos hace pensar como el mundo. Se ha infiltrado en casi todas las facetas del cristianismo Norteamericano. La práctica más común es el pecado etiquetado como "enfermedad". John MacArthur, en su libro The Vanishing Conscience (que no se ofrece en español), lo define muy bien. Enseñanzas, tales como la autoestima y la "Búsqueda de la voluntad de Dios para tu vida" y "Descubriendo sus dones espirituales", todos se tratan de la voluntad humana y el deseo egoistico y totalmente descuentan el hecho de que Dios es el amo de una persona que lo llama su Señor y Salvador. Tenemos incluso una visión distorsionada del Evangelio con decir que uno puede aceptar a Jesús como Salvador sin someterse a él como Señor. Esta filosofía se conoce como "fácil de creer-ismo" está muy extendido en los círculos evangélicos. Otro libro de John MacArthur abordado esta cuestión. Se llama, "El Evangelio según Jesucristo".

Uno de los libros que me despertó a mi depravación total como ser humano era, "El Altar de la Idolatría Sexual" por Steve Gallagher. El libro está disponible en español para aquellos que quieran leerlo. La prueba fue para mí, ¿estoy dispuesto a renunciar a la soberanía personal a someterse a la voluntad de Dios en mi vida o voy a seguir escuchando a los sistemas falsos? Toda mi vida he creido medias verdades. Mi culpa fue de creerlo en lugar de leer la Biblia para ser como los nobles de Berea, quien confirmó las palabras de Pablo por sí mismos. Esto no quiere decir que yo le echaría la culpa a los que me han dicho mentiras. De hecho, quería creerlas. Yo soy totalmente responsable por la oscuridad donde he andado.

En realidad, no soy una buena persona. Soy una persona muy mala que ha sido redimida por la gracia de Dios. Pero sé que Dios ha cambiado mi vida y eso me da alegría saber que le puedo servir con una conciencia limpia, sin contención y sin pretensiones.